Claves para llegar a un público juvenil

Claves para llegar a un público juvenil

Hemos hablado anteriormente del público infantil, pero no podemos olvidar a aquel público que ya ha pasado la infancia y está ya en esa etapa conocida como preadolescencia. Esta etapa es muy especial e individualista, por lo que hay que saber encontrar el equilibrio entre los aspectos globales que permitan llegar a la universalidad de los aspectos de esta edad, y los detalles individuales de cada joven. No es sencillo, lo sabemos, pero vamos a presentar aquí algunos consejos o claves.

¿Qué encontraras en este artículo?

  1. Intensidad para un público juvenil
  2. Las emociones en la juventud

Intensidad para un público juvenil

El público al que buscas dirigirte está marcado por vivirlo todo intensidad, por lo que tu obra debe adaptarse a ello. Los elementos que contemples en sus páginas han de desarrollarse con una intensidad vívida, con energía.

Una historia intensa no es lo mismo que una historia con intensidad. Has de imprimir a cada acción la energía suficiente como para que los lectores la sientan vibrar dentro de ellos. Es decir, han de sentir la misma adrenalina que están sintiendo los personajes de tu novela.

Acciones rápidas, pero con detalle. Lugares que atrapen. Obstáculos misteriosos. Personajes con carácter. Estas son algunas de las cosas que no pueden faltar en tu obra si quieres que atrape a la juventud.

Además, no olvides que son las primeras veces las que más impresión causan, las que más marcan, y las que nunca se olvidan. Por ello, cada elemento, personaje, o acción que incluyas por primera vez, ha de ser descrito como único. Y si no es la primera vez, deberás contarlo como si lo fuera.

Las emociones en la juventud

Los jóvenes se mueven por impulsos y emociones, y así han de ser los personajes que encuentren en los libros. Buscan sentirse apoyados y comprendidos dentro de la vorágine que les supone la vida a esas edades complejas. Tu obra se ha de convertir pues, en esa fuente de apoyo y comprensión. Pero para ello, debe estar cargada de emociones a flor de piel, de sentimientos, de vaivenes, de subidas y bajadas. Pero, no olvides dar un orden a este caos.

En la literatura nada es aleatorio, por ello, si estás pensando en introducir un contenido algo caótico, deberás tener en cuenta que ese caos también precisa un planteamiento previo, un orden.

Como conclusión, podemos resaltar que las claves para llegar a un público juvenil son saber situarse a su lado, en su terreno emocional, para que entiendan tu obra como una parte más de sí mismos, dentro de su círculo de intereses.